martes, 28 de enero de 2014

Todos los caminos me llevan hacia ti...

Hace 11 años hice la promesa de ir desde Leganes hasta la ermita de Almendros (Cuenca) andando, tras superar una enfermedad la que hoy es mi mujer. Esa promesa fue quedando en el olvido, y tras otros percances de salud de ella, pedí convalidar dicha promesa por el Camino de Santiago.   Pues eso. Un 7 de Octubre empecé dicho periplo del cual ahora me siento muy arraigado y vuelvo siempre que puedo.  Acuérdense de la fecha.

Hace 4 años tuve un accidente de motocicleta, del cual gracias a dios estoy bien (Una operación de hombro y muchos meses de rehabilitación). Fue un 21 de Enero, y siempre digo a la gente que cuando ese MALNACIDO salió del arcén sin mirar y me empujo hasta un muro de hormigón y darse a la fuga, mientras mi cuerpo se deslizaba abruptamente sobre el asfalto, mis ojos no veían más que a Santiago Apóstol (yo lo llamo familiarmente Patrón). Una vez restablecido, volví a los senderos de la flecha amarilla.  Acuérdense de la fecha. 

Hace unos días, estando trabajando tranquilamente, recibo la llamada de mi mujer indicando que tenemos que personarnos urgentemente en las oficinas del Instituto Madrileño de la Familia y el Menor. Dejamos los dos lo que estamos haciendo y nos dirigimos volando a esta. Se me olvidaba la fecha, fue el 21 de Enero. 

Una vez allí, nos dicen que es un bebe nacido el 7 de Octubre y que lleva un tiempo en un centro de acogida, va a ser nuestro hijo. Nos pusimos a llorar, nos abrazamos como si se acabará el mundo...

Hoy ya estamos disfrutando de Yago. Ya está con nosotros con sus gemidos, sus miradas, sus sonrisas, sus llantos, sus respiraciones entrecortadas por esa mirada de quien agradece todo el amor y cariño que se le está dando. Ahora nosotros soñamos...

Y yo sueño como cualquier padre.. Que no le pase nada nunca, que crezca bien, que cuando sea mayor sepa su historia y nos mire, y esa mirada sea como la explosión de un millón de palabras. Pero también sueño con volver a donde empezó todo...

... Estar caminando durante días, en mi Camino de Santiago, y que al llegar al Monte o Gozo me este esperando mi mujer y mi hijo, dejar la mochila y el bastón que siempre me acompañan, y coger el portabebés adaptado para andar los últimos 6 km hasta llegar a la plaza del Obradoiro y entrar con mi hijo a ofrecérselo al apóstol Santiago.

Gracias Yago. Todos los caminos me llevan hacia ti....