Desde primeros de este año, nos ha tocado vivir una época convulsa. La palabra pandemia y el ya famoso coronavirus -COVID19- están subyugados a nosotros y será muy difícil que se nos olvide, al menos en un periodo largo de tiempo. Fué cuando se empezó a escuchar que posiblemente deberíamos quedarnos confinados en nuestras viviendas, cuando nació esta idea llamada "relatos desde el confinamiento".
Harto de escuchar noticias sobre afectados, ingresos y, sobre todo, de las muertes que estaba causando el famoso bicho, me propuse como medida disuasoria escribir relatos, y publicarlos en mis redes sociales para que la gente tuviera una distracción mas. Quería aportar algo, dado que por imperativo legal, me tenía que quedar en mi casa, y no se me ocurrió otra cosa mejor que aportar mi grano de arena para ello. Empecé a publicar y como veía interacción sobre ellos, propuse también que la gente participase para así tener ocupaciones todos. Empecé a recibir relatos de amigos, conocidos, de personas ajenas a mi circulo, etc. Había material. Entonces pensé en como poder aportar mas a la sociedad en una situación tan dantesca como la que nos estaba tocando vivir, y la bombilla se me encendió...
Tanto relato no podía quedar en el olvido, y como soy de alma aventurera, propuse a un amigo llamado Pancho Casañas, realizar un libro con dichos relatos de carácter solidario, cuyo beneficio íntegro fuese a alguna asociación que lo destinase de alguna manera para paliar esta pandemia. Pancho tiene la virtud o el defecto de nunca negarse a nada, y se puso manos a la obra. Me propuso hablar con otro amigo en común, José Calero, tatuador e ilustrador, para que le propusiese colaborar. No acabé de terminar la proposición cuando ya dijo: -Si.
Empezamos a corregir relatos, ordenar, maquetar, horas intensas de trabajo, noches de poco dormir (cabe indicar que el libro estuvo realizado en apenas tres semanas), pero nos faltaba la guinda, una portada que hablase de la actual situación. Pancho que está en todo, me dice: -Habla con Alberto Ruiz, que seguro tiene algo de material fotográfico que nos pueda valer. Y así fue. Solo hay que ver la portada del libro para saber que es espectacular.
Dicho esto, faltaba buscar una asociacion y/o ong para destinar la obra. Contacte con otro amigo, Cirpri Quintas, que solidaridad e iniciativas de este tipo, es cinturón negro con unos cuantos danes, y me puso en contacto con Apadrina la ciencia, una asociación de cientificos que en estos momentos sabemos de sus necesidades para la investigación. No hubo más. Se ofreció la idea y aceptaron sin ningún problema.
Este es el resumen de todo. Relatos desde el confinamiento lleva un mes de venta en exclusiva por la plataforma amazon, habiendo estado cuatro semanas como número uno en ventas en la sección de ficción no versionada.
Quiero dar las gracias a todos los que de alguna manera habéis contribuido a que este libro haya visto la luz, dado que sin ellos, no hubiera sido posible.
Y para finalizar, aquí os dejo la fotografía del mismo, y el enlace por si queréis hacer dos buenas obras. La primera, reconocer el trabajo de mucha gente para intentar que esta epoca que nos ha tocado vivir sea con un poquito mas de luz, y la segunda, por vuestra solidaridad al adquirirlo para una buena causa.
En el libro, os encontrareis relatos de todo tipo, así como de algunos escritores, actores, humoristas, y de gente normal, como tu y como yo, que sólo quisieron sumar en este proyecto.
RELATOS DESDE EL CONFINAMIENTO de Juan Anselmo De Andrés Rodríguez
https://www.amazon.es/dp/B087H8WJGH/ref=cm_sw_em_r_mt_dp_U_DTrSEb78KZ37Z
